La minería en Chile está obligada a seguir innovando para transformarse. La razón es simple: porque produce 1/3 del cobre del mundo y la misma proporción de las reservas de nuestro planeta, en un escenario donde se proyecta una producción de 5,78 millones de toneladas para 2022, por lo que cualquier cambio generaría un gran impacto nacional y global.
La minería en Chile está obligada a seguir innovando para transformarse
Son diversos y complejos los desafíos que enfrenta la industria a futuro, ligados a la productividad, sustentabilidad, transformación digital, capital humano, operación, legitimidad y relación con las comunidades. Ahí, la innovación ofrece a las empresas mineras grandes oportunidades para ser más eficientes, productivas, con menores costos y con operaciones más seguras.
En Chile, una de las principales metas apunta a la carbono neutralidad para 2040. Lograrlo implica innovar para enfrentar la escasez hídrica por medio de tecnologías que permitan su mejor uso, la recirculación o desalinización del agua, la robotización para mejorar la seguridad de las personas, potenciar el cobre verde para que la electromovilidad sea realmente sustentable y finalmente trabajar en los tranques de relave para mitigar su impacto o generar nuevos productos.
Lograrlo implica innovar para enfrentar la escasez hídrica por medio de tecnologías que permitan su mejor uso
No obstante, hay que tener claro que esta transformación es más que un desafío técnico. Se trata de un desafío adaptativo. Por ello, la cultura y la formación juegan un rol fundamental.
Columna publicada originalmente en Diario Financiero el 29/09/2022″